El Monte Nebo es el legendario lugar donde Yahvé mostró a Moises la Tierra Prometida, tras 40 años de peregrinación por el desierto y cruzar el Mar Rojo. También es el lugar donde se piensa está enterrado. Es impresionante la vista sobre el Valle del Jordán, el Mar Muerto, el desierto de Judea, y la localidad de Jericó. En dias claros se puede divisar Jerusalem, Belén y el lago Tiberias.